Querido Diario

Publicado el martes 10 de junio de 2010 en El Gráfico


Nunca he llevado un diario. Cuando menos no uno de esos con pasta dura y brochecito maricón, en los que las adolescentes dibujan corazones, escriben cosas cursis y que esconden bajo su almohada. Rodeada de hermanos cabrones y con una familia digna del show de Laura en América, lo último que durante mi descarriada adolescencia se me hubiera ocurrido, habría sido ponerme a contarle a una hoja de papel las mil travesuras que hacía y las diez mil que nomás se me ocurrían. Y es que con siete hermanos, una madre más chiflada que Doña Lucha y la privacidad de un escusado de reclusorio, un diario habría terminado por convertirse en prueba confesional irrefutable , para recibir de mi sacrosanta progenitora una sentencia de al menos dos horas de terapia a cinturonazo limpio. No hay nalgas que soporten ese tipo de pedagogía.

Me llamo Lulú. Tengo 23 años y soy la quinta en una familia de ocho retoños trogloditas (única mujercita en una tribu de testosterona). Nací en Monterrey, pero he vivido en el Distrito Federal suficiente tiempo como para considerarme orgullosamente chilanga. Soy una chava como millones en esta ciudad, algunas veces dulce y coqueta, otras respondona y aguerrida. No voy por la vida armando broncas, pero si me buscan, brinco como si me prendieran una mecha. Me gusta el sexo, la música, la noche, el antro, el teatro, el cine, la comida francesa, el color rojo, el sexo, la lencería fina, los accesorios discretos, mi cama, la decoración, los galanes, los amigos, el reventón, una conversación amena, un buen vino, los tulipanes, dormir hasta tarde los domingos, hacer ejercicio y... ¿Ya mencioné el sexo? Soy, como decía, una chavita como cualquier otra. Vivo sola, estudio una carrera universitaria y me mantengo de mi trabajo, de siete de la mañana a doce o una de la tarde (según el día) estoy en la escuela, después, enciendo el celular para atender a mis clientes. A todo esto, soy prostituta.

Ya sé que suena cínico, pero ser prostituta en estos tiempos no es tan escandaloso como parece. Tampoco voy a tratar de insultar la inteligencia de nadie, diciendo que es un oficio como cualquier otro, quien lo diga, nunca ha tenido que poncharse a un borracho de 120 kilos, y cara de espécimen exótico del zoológico, a cambio de unos billetes. No, desde luego que cobrar por tener sexo no se compara con ninguna actividad donde los calzoncitos se queden en su lugar en cada transacción, pero también debo reconocer que no es ya una cosa como para tomarse con demasiada solemnidad.

Afortunadamente, hasta los prejuicios evolucionan. Hoy, con muchísima razón, de una mamá soltera, se dice que es una mujer fuerte, valiente, con coraje y digna de admiración, de un artista que sale del clóset, se dice que es un ejemplo de honestidad, que se necesita tener los blanquillos bien puestos para admitirlo o, cuando mucho, que nomás ha estado viviendo la vida loca. ¿Por qué entonces no va a decirse algo parecido de una chica que le pone un justo precio a los ratos de placer que modestamente vende entre sus piernas? La neta es que aunque siempre habrá gente que juzgue y critique, me tranquiliza saber que cada vez somos más quienes vemos las cosas con generosidad y sin calificar a las personas de acuerdo al porqué, cuándo, cómo y con quién cogen.

Después de todo, en los últimos tiempos el sexo ha dejado de ser un asunto tan ceremonioso. Cada vez más gente reconoce que, aunque tener sexo por amor es de lo más hermoso, tenerlo por purita diversión es muy placentero y calma riquísimo los nervios. El caso es que justamente así me gano la vida, calmándole los nervios a mis clientes con mi boquita, con mis manos y con las caricias acompasadas de todo mi cuerpo. Cojo varias veces al día y en cada ocasión recaudo los regalitos que, generosamente, me dejan mis queridos clientes para que a mi refri no le falte nada. Unos pocos billetitos a cambio de un recuerdo inolvidable.

Eso es lo que hago para vivir, pero la neta está muy lejos de explicar quién soy. Coger por dinero es sólo una parte de mi historia. Además de puta, soy hija, hermana, amiga, nieta, estudiante, vecina, amante y madre adoptiva de un hermoso cachorrito. Cada faceta tiene su encanto y su complejidad, pero en todas soy yo, con distintas presentaciones. Naturalmente, mi profesión es un secreto para muchas de las personas con las que convivo todos los días y para eso tengo que inventar toda clase de pretextos y escapatorias. Llega a estresar, pero tiene lo suyo de divertido.

Escribir una columna en El Gráfico y que salgan mis fotos impresas a un ladito de lo que escribo es muy emocionante. Se me da la oportunidad de compartir aquí anécdotas, en un tono ligero, irónico y pícaro sobre el arte de andar puteando y, claro, de esconderme para ser (o parecer) una estudiante normal. Familia, amigos, clientes, maestros, todo como parte del coctel y que iré poniendo, una vez por semana, en estas páginas.

Decía que nunca he llevado un diario, pero soy de las que cree que jamás es tarde para comenzar y esta, creo, es la mejor oportunidad para empezar el mío. Mi querido diario.

Hasta el próximo martes
Lulú Petite

6 comentarios:

  1. No llevarás un diario por que no encontrarias ni siquiera un Arbol con los suficientes folios para plasmar, la mitad, de lo que has vivido. Experiencias, disgustos, "crushes", idas al cielo... aunque solo fueran algunos detalles.

    Trabajo, es; ingrata, la gente que le quita el valor. Por que así somos y no lo aceptamos.

    Son formas de buscar y lograr lo que uno quiere.
    Uno elige que escribir en su diario. Todos tenemos uno, solo que no siempre escarbamos en nuestra cabeza para recordar como fue que ocurrio. Tal vez sea, en ocasiones, miedo por recordar que hicimos alguna vez. Pero como nos gusta revivir lo inolvidable.

    Letras y palabras, mal escritas o sin entintar. Es solo dejar que la mano diga lo que la cabeza siente.

    jaja, no fue albur. Pero tómenlo por el lado amable

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  2. Creo que lo que haces es muy valiente, creo que tiene mas de interesante y divertido que estar en en una oficina todo el dia. Considero que tienes muchas agallas y eres muy fuerte. En cuanto al desprestigio que cargan personas como tu que se dedican al placer, pienso que es mas por el antagonismo que simbolizan de lo que socialmente consideramos amor, pero que en realidad nada tienen que ver con ello y en gran parte demuestra la incapacidad del ser humano social de reconocer que somos animales con la necesidad de placer sin amar

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  3. El amor a veces parece sobre valorado, a pesar de que es hermoso, no deja de ser mas un concepto o una serie de ideas y prejuicios colgados a un sentimiento pasajero.

    La verdad, no creo que hacer lo que haces para ganar dinero sea malo, y pues al contrario creo que es más intelignete que puedes hacer, con mayor razón lo digo por que en mi vida me e topado con cada mujer tan interesada, que solo esta con un hombre por lo que puede obtener de él, y que es eso si no ser una puta disfrazada.

    Incluso pienso que cuando es por diversión no hay nada que tener sexo con una puta, por que sabes exactamente cuanto te va a costar, y sabes lo que recibirás, así sin engaños, incluso a veces hasta sale mas barato, y lo que no tiene precio, no soportas celos, exigencias, ni cuestionamientos.

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  4. Te queiro por su belleza física, la sinceridad y la belleza de tu alma. Me gustaría conocerte algún día.

    Sam Washington

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  5. Lulú: Lo que tu haces no es recomendable, no es decente, no esta excento de enormes riesgos, no es digno de admiración, no es decoroso y definitivamente no entrarías entre las posibles candidatas a nuera para ninguna mamá que tenga un ápice de escrúpulos y un ápice de amor a su hijo (porque hay mamás que carecen de ambas cosas). Ya te dije lo que no eres, ahora te voy a decir lo que si eres: Eres muy bonita, eres muy sexy, eres muy inteligente, eres muy sincera, eres extremádamente divertida y eres parte de ese exclusivo grupo de mujeres que es un peligro para la gran mayoría de nosotras porque no tiene miedo "al que dirán", y cuando una pierde el miedo a esa frase.... varios mundos de posibilidades se abren en frente.... Saludos

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  6. Mi buena lulú, soy nuevecillo aqui en tu blog, de hecho te conoci apenas un par de meses en el diario El grafico, y debo confesarte que de primera vista lo que mire fue las fotitos tuyas y ya despues la historia jajaja :), pero ahora me gusta mucho ambas cosas, me agrada mucho la forma tan picara y divertida en como redactas tus historias, pero fue hasta estos momentos que empiezo a ver de primera mano tus historias, comenzando por ésta, tu presentacion. Déjame decirte que vaya que eres una mujer bastante valedora pues hacer lo que haces lleva su tiempo y esfuerzo, la forma en que miras las cosas es de valorarse y que no le tengas miedo a nada tambien demuestra el tipo de persona que eres, me late mucho como piensas y en serio que el dia que te conozca voy a darme cuenta de una sola cosa, que mas alla de la profesion que llevas hay una personita encantadora y que puede ser facilmente una amiga con la cual pasar un momento muy padre y exquisito, te mando un abrazo enorme, presentandome, ya lo ves me hago llamar Gabo, para mis amigos asi que asi nos llamaremos vale, y x cierto, tengo una preguntilla..., despues de ya mas de año y medio de estar mas en la farandula por decirlo asi, aun nadie en tus alrededores sabe a que te dedicas?, tal vez suene muy metichota mi pregunta pero me intriga mucho la respuesta jajaja que chismoso soy me cae :), bueno, por aca andaremos disfrutando de tus historias, tus fotitos y demas alocadas ideas que me han hecho ya fan de tu blog, un beso muñequita! ;)

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