Yo no soy trabajadora

De origen. De nacimiento, yo soy blogger.

No nací tuitera ni facebookera. No me he animado a entrar al mundo del videoblog. De hecho también las otras redes sociales no las tengo tan atendidas como quisiera.

Cuando empecé este blog éramos muy pocas colegas usando este medio para comunicarnos. Me refiero al electrónico. Antes que yo, varias extranjeras y, en México, Fernanda Siempre. Contemporáneas al tiempo en que comencé, si mal no recuerdo sólo Natalia.

Poco a poco aparecieron muchas más. Muchísimas más. Bloggeras, tuiteras, facebookeras, webmisstres, escritoras, relatoras. Hay varias incluso que, seguramente por coincidencia, decidieron apellidarse Petite.

Claro, mi nombre está registrado, pero tampoco quiero tratarlo como una marca, aunque sí me gustaría dejar claro que no conozco a ninguna de las otras Petites que se anuncian con el primer nombre diferente. Es su chamba y sabrán cómo la hacen, espero que maravillosamente y que les vaya bien, pero siempre lo he dicho. En un negocio como éste, prefiero trabajar sola, sin patrones, pero también sin "pupilas".

Soy blogger y no escribo en mi blog... ¿Por qué? No sé, con tanta cosa en la cabeza y poco tiempo lo dejo pa'l rato y el rato nunca llega. Hoy, sin embargo con tanto hablar de las reformas se me metió el tema en la cabeza.

El caso es que, probablemente, mañana se aprueba la famosa reforma laboral. No sé. Ojalá que no se apruebe. He oído muchísimas críticas y muy pocos argumentos del porqué es buena. Sólo esos que dicen, en la abstracción, que México necesita ir adelante, que son reformas estructurales necesarias para que el país avance, no entiendo cómo ni porqué avanzaría así. No sé si un país avance a siete pesos la hora y demás milagritos que le cuelgan a la famosa propuesta.

De todos modos yo no soy trabajadora. No al menos de las que se regula esa Ley. Algún día, claro, espero serlo y encontrar un empleo donde me paguen por hacer lo que aprendí en la escuela. Espero que entonces ya no tenga, como hoy, que cobrar por hora y, sobre todo, no llevarme la sorpresa de que dejé de coger con clientes, para que me cojan con la Ley. Porque dicen que a como está, de que te empinan, te empinan.

Por lo pronto no soy trabajadora. El trabajo que hago no es reconocido por la ley como trabajo. No sé, si yo fuera diputada (que nunca seré) pensaría en las mujeres como yo. No en las que cobramos bien, sino en las que viven de éste y otros mil trabajos no reconocidos, prostitutas, jornaleros, trabajadoras del hogar, empacadores, cuida coches, intendentes, jardineros, plomeros, y muchos más que ya cobran por hora, que no tienen  derechos, ni sindicatos, ni protección y que, cuando el cuerpo deja de ser joven, sano y fuerte, comienzan a vivir un infierno de falta de garantías. Yo no lo sé, pero supongo... supongo que para los que legislan adentro de la cámara y para los que se quejan afuera, toda esa gente, muchísima, no forma parte de la discusión, menos del articulado.

No sé, probablemente estoy hablando de cosas que no sé. En cualquier caso, como lo decía al principio, empecé blogger y cuando comencé eramos pocas. No me alegra que haya más chicas dedicándose a esto. Es un mundo duro, pero me da gusto que tengamos más presencia en internet. Saber que existen me hace no sentirme sola...

11 comentarios:

  1. Muy buen articulo, me latio un buen, preciso pero en estado de divagación...

    ResponderEliminar
  2. Muy bueno... Me gustó bastante por su entonación ensoñadora... Gracias...

    ResponderEliminar
  3. ojala alugos de nuestros diputados y diputadas pensaran como tu en esos trabajadores, pero solo ven por sus fracciones y por los liders sindicales.

    besos lulu

    ResponderEliminar
  4. Gracias por este lindo cariño al corazón.
    ladelcabaret.

    ResponderEliminar
  5. Tratas tu cuerpo como mercancía, ¿pero no quieres tratar tu nombre como marca?

    ResponderEliminar
  6. Siempre ha sido bueno leerla, señorita... Si algo me quedo, es que personas cómo tú deberían de estar en la cámara de senadores, personas pensantes, personas que han vivido y conocen las realidades más duras de México. Es bueno saber, que no eres sólo cachondería y tetas lindas.

    Saludos,

    ResponderEliminar
  7. Ademas de hermosa eres una persona preocupada y altruista
    e inteligente, esa reforma en efecto no tendria manera de funcionar

    ResponderEliminar
  8. Lulú, muchas gracias por tus comentarios.

    Te había escrito una cosa bien padre y se me borró (ahora entiendo a mis lectores, jijiji).

    Pero sí, es una lástima que todo lo que hemos aprendido en este trabajo y blogueando no pueda ser añadido a un curriculum.
    Y hablando de eso, una de las razones por las que decidí no aceptar escribir en un periódico fue porque cuando les pregunté que si les agradaba lo suficiente mi manera de redactar me darían trabajo en alguna otra sección me contestaron que no. Que no podían tener en la planilla de un periódico serio a una exprostituta, que esas cosas trascendían.

    Uste ya hace mucho debería tener un trabajo "decente" bien pagado y ser una escritora rockstar, y lo sabe. Eso a veces me pone bien triste. Pero otras, egoístamente me pone feliz, porque como dices, no me siento sola.

    ResponderEliminar
  9. Petite!!!... de acuerdo en todo, pero... sola??!! never de nunca jamás!!! yo (y muchos) estamos contigo, más juntito de lo que crees, más de lo quienes conviven en tus espacios diarios.. yo siempre te pienso. Sola?? Me tienes a mi!!! un beso

    Scaramouche

    ResponderEliminar
  10. Supongo que la reforma de la que hablas se referirá a quienes trabajen por cuenta ajena, pero tb existen muchas de tus compañeras que no son autónomas como tú y trabajan en clubs, whiskerías y pisos donde sí existe una relación laboral directa, de dependencia.

    Tu trabajas por cuenta propia, en régimen de autónomo. Aquí en España una abogada muy conocida, Gloria Poyatos, demostró que era posible inscribirse como prostituta en la SS. Claro que eso tiene muchos más inconvenientes q ventajas. Lo q se necesita es q se reconozca como un trabajo cualquiera para q por ejemplo se derogue el art 188 del CP q prohibe q alguien se pueda lucrar de la prostitución ajena aun cuando exista consentimiento. Este artículo está siendo empleando por las autoridades para extorsionar a los empresarios del sector, exigiéndoles dinero para no cerrar sus negocios. Tb muchas chicas q ejercer x cuenta propia son amenazadas con q, o les abonan una cuota, o acusan de proxenetismo a todo aquel q consideren q se beneficia del trabajo de la chica: compañeras de piso, familiares, novios...

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...