Entre la escuela, el trabajo, internet, la columna y la vida, tengo mi semana tan saturada que apenas recuerdo lo que es paz. Han sido tan intensos los últimos días, que difícilmente puedo creer que hace apenas dos semanas regresé de mis vacaciones de invierno.
A pesar de todo, ha sido una semana interesante. Ayer, por ejemplo, viernes de quincena:
En la mañana el gym. A media rutina, recibí la llamada de un argentino que conocí en las vacaciones. Buena onda, guapo, interesante. Un buen prospecto. Me pidió que saliéramos y yo estuve a punto de decirle que sí, pero recordé que entre las uvas de año nuevo, me hice el propósito de no complicarme la vida con infiernitos pasionales. Es tiempo de ponerme las pilitas en la escuela y el trabajo, así que tomé un Pepto pa' poner sosiegas a las mariposas de la barriga y con el dolor de mi entrepierna, mandé a volar al argentino. Le dije algo así como que tenía que ir a buscar petróleo a Alaska y creo que entendió el mensaje.
A las nueve la escuela. Como siempre, David lindísimo. Llegó un maestro nuevo. Es guapo, pero medio mamila, se las da de muy cabrón. Como buen pájaro nalgón, marcó su territorio dejándonos un friego de tarea. Me dieron ganas de matarlo, aunque no puedo negar, que el maestrito con todo y lo mamón, está bueno.
La clase de las 10:00 estuvo de hueva, así que con la mayor discreción posible, me puse a twittear: [@lulu_peitte Es quincena. Es viernes. ¡HOY TOCA]
Los tuiteros respondieron cosas lindas o chistosas, y me alivianaron la hora de aburrimiento (Gracias mil).
Después de la escuela me fui de volada a casa, a ponerme linda para la respetable clientela. Para trabajar me puse un vestidito azul, con los hombros descubiertos y la falda a mitad del muslo, muy sexy, sobre todo por los zapatitos que me traje del gabacho. Comencé a atender llamadas telefónicas. Fue un buen día, clientes estupendos, gentiles, divertidos y sexosos. Me la pasé de pelos hasta que el sueño me venció.
Hoy en la mañana, ya tardecito, me puse a revisar el twitter en mi fon y a redactar mis mensajes de hasta 140 teclazos:
[@lulu_peitte Ayer fue viernes y tocó... y tocó RIQUÍSIMO. Hoy es sábado y me quiero meter a la cama temprano ¿Se antoja no? ¡Mhhh! Saludos tuiteros.]
Los amigos comenzaron a responder, como siempre, cosas lindas, hablamos de la rifa y esas cosas hasta que cayó chambita...
A pesar de todo, ha sido una semana interesante. Ayer, por ejemplo, viernes de quincena:
En la mañana el gym. A media rutina, recibí la llamada de un argentino que conocí en las vacaciones. Buena onda, guapo, interesante. Un buen prospecto. Me pidió que saliéramos y yo estuve a punto de decirle que sí, pero recordé que entre las uvas de año nuevo, me hice el propósito de no complicarme la vida con infiernitos pasionales. Es tiempo de ponerme las pilitas en la escuela y el trabajo, así que tomé un Pepto pa' poner sosiegas a las mariposas de la barriga y con el dolor de mi entrepierna, mandé a volar al argentino. Le dije algo así como que tenía que ir a buscar petróleo a Alaska y creo que entendió el mensaje.
A las nueve la escuela. Como siempre, David lindísimo. Llegó un maestro nuevo. Es guapo, pero medio mamila, se las da de muy cabrón. Como buen pájaro nalgón, marcó su territorio dejándonos un friego de tarea. Me dieron ganas de matarlo, aunque no puedo negar, que el maestrito con todo y lo mamón, está bueno.
La clase de las 10:00 estuvo de hueva, así que con la mayor discreción posible, me puse a twittear: [@lulu_peitte Es quincena. Es viernes. ¡HOY TOCA]
Los tuiteros respondieron cosas lindas o chistosas, y me alivianaron la hora de aburrimiento (Gracias mil).
Después de la escuela me fui de volada a casa, a ponerme linda para la respetable clientela. Para trabajar me puse un vestidito azul, con los hombros descubiertos y la falda a mitad del muslo, muy sexy, sobre todo por los zapatitos que me traje del gabacho. Comencé a atender llamadas telefónicas. Fue un buen día, clientes estupendos, gentiles, divertidos y sexosos. Me la pasé de pelos hasta que el sueño me venció.
Hoy en la mañana, ya tardecito, me puse a revisar el twitter en mi fon y a redactar mis mensajes de hasta 140 teclazos:
[@lulu_peitte Ayer fue viernes y tocó... y tocó RIQUÍSIMO. Hoy es sábado y me quiero meter a la cama temprano ¿Se antoja no? ¡Mhhh! Saludos tuiteros.]
Los amigos comenzaron a responder, como siempre, cosas lindas, hablamos de la rifa y esas cosas hasta que cayó chambita...
Ya regresé de una buena tarde y pinta bien la noche.
Esta rico como vives tu vida, aunque esta agitada, esta buena, despues se olvida lo agitada que fue la semana despues de buenos momentos con gente diferente!!!
ResponderEliminarSuena divertido, con riesgos pero divertido...
ResponderEliminarRenán Negro
lulu eres lo maximo!!!
ResponderEliminarCon todo y todo esta de huevos tener un día ocupado, yo llevo un rato con problemas de tiempo (tengo mucho) y la verdad... envidia de la buena... salu2
ResponderEliminarRealmente eres maravillosa, ya quiero conocerte, eres mi amor platónico y mi deseo ardiente...
ResponderEliminarHablas como escribes?
ResponderEliminarPues que vida llevas, de ensueño, quien como tú, yo que te puedo decir, trabajo en un buen lugar, pero no deja de ser una jaula de oro, mi amante (novia), ya no me habla seguro ya se consiguió a otro, bueno tendré que salir con Brenda, Mi esposa esta como fiera, parece que sospecha de mis amigas, pero no todo está mal, regreso con mis amigos de buceo, y arranco mi pequeño negocio // no como el tuyo, algo no tan divertido, pero económicamente rentable. // y eso te da la diversión.
ResponderEliminarEl chilango.
Preciosa:
ResponderEliminarCuidado con los excesos, el tener mucho trabajo y mucho estres te altera a tal grado que esta uno irritado todo el tiempo.es um buen cosejo.
te mando besos